La tiroides es una glándula del sistema endocrino y que produce unas hormonas que son muy importantes para el cuerpo. Esta glándula está localizada en el cuello por encima de la clavícula y tiene forma de mariposa. Lo que hace a las hormonas tiroideas tan importantes es que controlan el ritmo de muchas actividades en nuestro organismo.
Cuando hay una alteración en la tiroides que disminuye la producción de las hormonas tiroideas se le llama Hipotiroidismo. Este padecimiento afecta el metabolismo del cuerpo. A continuación vamos a ver cómo afecta cuando se presenta Hipotiroidismo en el embarazo.
¿Hipotiroidismo en el Embarazo?
Durante el embarazo, una alteración en la tiroides puede llegar a ocasionar problemas para la madre y el bebé.
- En la mamá: se puede presentar desde anemia, dolor, debilidad muscular, insuficiencia cardíaca, diabetes gestacional, presión arterial alta (preclampsia), sobrepeso. Existe también un riesgo de aborto espontáneo.
- En el bebé: Ya que la hormona tiroidea es un activador de las células, en el embarazo permite que los tejidos del embrión se desarrollen adecuadamente. Esta hormona es esencial para el desarrollo de órganos vitales como el cerebro. Debido a que en los primeros tres meses el bebé no tiene glándula tiroides, depende exclusivamente de la hormona materna. También durante toda la gestación se encarga de las células de la placenta.
En una mujer embarazada la demanda de la hormona tiroidea llega a ser un 50% mayor que habitualmente. Lo que quiere decir que si hay hipotiroidismo presente van a presentar una respuesta insuficiente. Aunque en muchas mujeres con hipotiroidismo se logra suplir los mayores requerimientos de la hormona sin tener mayor problema. Cuando el organismo no tiene la capacidad de responder es cuando aparecen los síntomas.
Síntomas
Algunos síntomas del hipotiroidismo se pueden confundir con cambios que se presentan normalmente en la mujer durante la gestación. Por ejemplo fatiga, dolores de cabeza o somnolencia. Otros de los síntomas que se presentan son:
Lentitud de movimientos y al hablar
Frío
Piel seca
Uñas quebradizas
Caída del cabello
Estreñimiento
Fatiga por realizar actividades que antes se hacían sin dificultad
Tendencia a la depresión
Aumento de peso
Retención de líquido
Somnolencia o insomnio
Cefaleas
Dolores musculares y calambres
Confusión y problemas de memoria
Edema
Lengua rasposa o inflamada
Voz ronca o áspera
Tratamiento
Cuando el Hipotiroidismo en el embarazo es desconocido y por lo tanto no tratado puede originar problemas graves. Por eso es importante comentarle al ginecólogo obstetra cuando se haya sufrido un trastorno en esta glándula anteriormente. Así como también si se tienen antecedentes familiares del padecimiento de alguna alteración tiroidea en padres, abuelos o hermanos.
Así el podrá ayudarte a controlarlo de manera adecuada. Regularmente el tratamiento consiste en sustituir la hormona tiroidea faltante por un medicamento llamado Levotiroxina sintética.